domingo, 5 de julio de 2020

El significado de la paz




Había una vez un rey que ofreció un gran premio a aquel artista que pudiera captar en una pintura la paz perfecta. Muchos artistas lo intentaron. El rey observó y admiró todas las pinturas, pero solamente hubo dos que a él realmente le gustaron y tuvo que escoger entre ellas.

La primera era un lago muy tranquilo. Este lago era un espejo perfecto donde se reflejaban unas plácidas montañas que lo rodeaban. Sobre éstas se encontraba un cielo muy azul con tenues nubes blancas. Todos quienes miraron esta pintura pensaron que ésta reflejaba la paz perfecta.

La segunda pintura también tenía montañas. Pero éstas eran escabrosas y descubiertas. Sobre ellas había un cielo furioso del cual caía un impetuoso aguacero con rayos y truenos. Montaña abajo parecía retumbar un espumoso torrente de agua. Todo esto no se revelaba para nada pacífico.

Pero cuando el Rey observó cuidadosamente, el vio tras la cascada un delicado arbusto creciendo en una grieta de la roca. En este arbusto se encontraba un nido. Allí, en medio del rugir de la violenta caída de agua, estaba sentado plácidamente un pajarito en el medio de su nido...

El Rey escogió la segunda...

- "Porque", explicaba el Rey, "paz no significa estar en un lugar sin ruidos, sin problemas, sin trabajo duro o sin dolor. Paz significa que, a pesar de estar en medio de todas estas cosas, permanezcamos calmados dentro de nuestro corazón. Este es el verdadero significado de la paz."

Esto es lo que nos enseña Dios, que a pesar de las circunstancias, a pesar de las pruebas, a pesar de las tormentas y los truenos que rodean nuestra vida, en los brazos de Él podemos estar en calma, en paz. 

Al igual que el pajarito en su nido, en el cual estaba seguro que nada le pasaría, aún rodeado de torrentes de agua, bajo un cielo furioso y montañas escabrosas.

Respecto a la paz, Filipenses 4:7 nos dice lo siguiente:

"Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús."

Estando con Dios, viviremos en paz aún en medio de las pruebas, aún en medio de la tormenta, aún en medio de las dificultades. 

Se acuerdan del artículo que escribí hace unos días sobre Pablo el hombre de las adversidades? Allí les contaba como Pablo estando preso, sufriendo persecuciones e incluso brutales golpizas que menguaban su salud, vivía en constante contentamiento, fortalecido por la fe en Cristo.

Esa era su paz, ese era su nido detrás de una caída torrentosa de agua, Jesucristo era su resguardo.

Te invito entonces a pedirle a nuestro Padre Celestial que nos resguarde de toda adversidad, y que si estamos en medio de una prueba, fortalezca nuestra fe.

Mi canción para el día de hoy es:





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